The Vieques struggle begins
Vieques Struggle: A Digital Video Archive

Juan Carlos Rodríguez

Zenon: Mucha gente piensa que la lucha de Vieques contra la presencia militar empezó alrededor de 1978. No es cierto. Siempre hemos estado en lucha desde que la marina puso su primera bota en esta isla. La lucha empezó en 1040, podriamos decirlo así, cuando por primera vez ellos llegaron a Vieques y empezaron a expropriar a la gente, en una expropiación forzosa. Tenemos los documentos respecto a eso, de la mucha gente que ellos le compraron, le pusieron un precio a sus propiedades, y nos dijeron que teníamos cierta cantidad de horas. Algunos le dijeron que tenían 24 horas para tenerse que mudar de la parte oeste de la isla de Vieques. Ahí practicamente empiezan las luchas, porque mucha gente tenía su terreno, que no conocía otro sitio, que había estado nacido y criado ahí mismo, como que no podían entender que venía un extranjero a apoderarse de su tierra. Y no solamente a apoderarse sino a atropellarlo. Por ejemplo, mi mamá… Yo tenía 4 años cuando nos expropiaron, y cuando nos fueron a expropiar, le dieron 24 horas para mudarse, estaba divorciada de mi papá, y cuando le dieron el papel, ella no, primero que no lo creía y segundo que decía, bueno y qué voy a hacer yo, si yo estoy aquí sola con un niño y una niña, que era una hermanita que tenía, para dónde voy? Y creíamos, o ellos creían para aquel entonces, que era, ellos no podían creer, como que era un sueño de que ellos tenían que abandonar su sitio que ellos, donde ellos … donde estaban sus raíces. Pero era cierto. Ellos tenían lo que le llaman, quizás ustedes en Estados Unidos lo mismo le dicen bulldozer, nosotros en Puerto Rico le decimos una puerca, que yo creo que es el nombre más correcto, y eso lo traían para tumbar las casas a la gente que no accedían a irse en el tiempo que ellos le habían dado. Ahorita si tenemos tiempo, sino mañana si ustedes me lo permiten se lo podemos dar a ustedes, tenemos documentos por ahí de la gente que no sabían leer ni escribir y le hacían una cruz, y habla de la cantidad de dinero que le daban por sus propiedades. Hubo gente que le dieron hasta $75, $30 dolares. Y le decían vete. Entonces lo que le daban era un papelito a la gente donde tenía 4 números, eran unas estacas que ponían en el área, donde supuestamente tu tenías que ir a unos cañaverales y tratar de conseguir donde estaban esas tablas, y ahí era, de acuerdo al papel, donde tú te ibas a a ubicar. No había agua potable, no había luz eléctrica, no había absolutamente nada, lo que había era gana’o [ganado], vacas y bueyes. Nosotros teníamos una casita de zinc y madera, porque para aquel entonces casi todo el mundo en esta isla, y en el resto de Puerto Rico, éramos gente de unos recursos bien pobres. Y la casa de nosotros, cuando se fue a desbaratar, quedo en un estado de deterioro que no sirvió nada. Y son cosas que sí, mi mama siempre estuvo bien segura de que a mi no se me olvidaba, fueron cosas como estas. Ella recogió en una sábana las poquitas cosas que se podían utilizar quizás cuando llegáramos al otro sitio, pero se paró en la orilla de la carretera, conmigo de mano y mi hermanita y viene un señor que era barbero, le decían don Polito Cruz, y le dijo: bueno Trini, Trini era el apodo de mi mamá, se llamaba Trinidad, qué vas a hacer ahora? Y ella le dijo: la verdad que no sé ni pa’ dónde voy y ni qué voy a hacer, qué voy a hacer con mis hijos. Y él le dijo pues yo soy barbero. Y nos regaló una barbería que tenía, que tenía una puerta y dos ventanitas, que, entre mucha gente, la echaron en un camión, y la llevaron al barrio Santa María y cuando llegó allá, llegó sin puertas y ventanas, pero por lo menos llegó. Y allí yo estuve hasta la edad, me crié como hasta la edad, diría yo, de 12 años, más o menos. Tenía 4 cuando esto sucedió. Le traigo esto porque mucha gente en Puerto Rico, en los Estados Unidos, donde hemos hablado de estas luchas, en to’s sitios, la gente piensa que la lucha y que Carlos Zenon se envolvió en una lucha ayer, o en el 78, pues, Carlos Zenon sencillamente, prácticamente, nacío en una lucha. Ya a los 4 años de edad estaba en una lucha porque me patearon, me botaron, me… Y mi mamá estuvo bien segura de que estas cosas, a medida que pasaba el tiempo me las iba recordando, me las iba recordando, [para] que nunca se me olvidaran.