ENTREVISTA ZENON VIEQUES 2 2018
Vieques Struggle: A Digital Video Archive

Juan Carlos Rodriguez

CARLOS ZENÓN:
… queda inconclusa porque luchamos, peleamos, en esta familia todos estuvimos presos, todos estuvieron presos en las cárceles federales. Este… porque en Vieques se ha hablado siempre de las tres D, creo que eran cuatro o cinco, qué sé yo cuántas D eran, pero era descontaminación… desarrollo, devolución. ¿Qué pasa? Cuando se hacen los campamentos, un tema del que la gente no habla mucho, algunos no quieren hablar, por las razones que sea no hablan, es que se obtiene, que el país desconoce, a la Marina se le quitó la tarjeta principal de los bombardeos. Que es lo que después, más tarde, esta familia le llamó Monte David, que era el tanque grande… sin esa tarjeta, la Marina no tenía razón para estar en Vieques, porque no podía bombardear, ¿entiendes?

Entonces aquí se planifica una actividad de llevar una cruz allá arriba, de hecho, de los primeros que estuvieron allá arriba que después… fue Pablo Connelly.

ALEIDA ENCARNACIÓN:
Al cuarto, quinto día yo estaba con Mirna cuando ellos se embarcaron, que se embarcó Pablo y se embarcó, este… Omar Pérez y Sombra, ellos tres con la lanchita.

CARLOS ZENÓN:
Porque es una pena, no es una historia cortita, pero como se van al monte, y voy a hablar a calzón quitado, aquí planifican esa actividad Ismael Guadalupe, Carlos Ventura y Julio (no se entiende). Bien, yo, por esas casualidades de la vida, yo estaba en una conferencia de prensa un día antes, en Puerto Rico, denunciando un barco que iba a pasar por las costas de Puerto Rico con uranio. Para que todo el mundo estuviera pendiente en Puerto Rico y no lo dejaran entrar en ningún puerto. Yo hago la conferencia en el Colegio de Abogados. Al otro día regreso a Vieques temprano a la mañana. Cuando llego aquí a esta casa, está llena de gente y digo “¿qué pasó?”. Aquí estaba Tito Kayak, aquí estaba uno que se llama Carlos Sánchez, y los muchachos de aquí, había un revuelo porque iban a ir a la actividad que iban a llevar la cruz exactamente adonde mataron a David Sanes, que era en el puesto de observación, el cerro Matías.

Bien… esta historia ustedes la van a conocer ahora y el pueblo la va a conocer como dentro de un año que va en un libro. Los muchachos dicen: “Viejo, ¿vamos para la actividad?”. Yo les digo: “No, yo acabo de llegar, estoy cansado…”, esto y lo otro… “Vamos un ratito a acompañar…” Y me convencen, y salimos de esta casa Tito Kayak, Carlos Sánchez, (no se entiende) y yo. Cuando llegamos a La Esperanza, los organizadores de ese proyecto no habían llegado. Este… pues, la prensa ya estaba allí. Porque cuando nosotros teníamos la refriega con la Marina, de hecho, cuando vean el libro, si lo ven, se van a encontrar allí que yo digo por primer vez en la historia de esta lucha, en ese libro, con toda… que el estratega de la lucha en contra de la presencia militar, de los pescadores, no era yo. Porque yo nunca lo fui. La prensa decía “mira, que Carlos Zenón…”, no, no, no. Ese era Lino Lanzó, ese era el estratega, un viejito de 76… 76 años tenía.

PREGUNTA:
¿Me puede mostrar la foto? ¿Podemos ir allí a la pared?

CARLOS ZENÓN:
Sí, no hay problema.

PREGUNTA:
Voy un poquito a… ¿se quiere acercar un poquito de Lino, aquí en la foto para… poderla tomar?

CARLOS ZENÓN:
Este… me voy a parar ahí… pero hay mucha tela que cortar… Como les decía antes, yo en la prensa… que “Carlos Zenón aquello, que Carlos Zenón lo otro, que Carlos Zenón…”, la televisión, los periódicos… Miren, yo me mantenía callado como una cuestión de estrategia. ¿Por qué? Que es lo que este país desconoce: cuando tú estás peleando contra un monstruo como la Marina de guerra de los Estados Unidos, tú tienes que tener cuidado lo que tú haces y dices. Entonces, ¿qué pasa? Yo no voy a decir: “No, no, yo no soy…”, porque había que protegerlo a él. A él había que protegerlo. Si él era el estratega, en cualquier momento que la Marina hubiera tenido una oportunidad, y él que pescaba solo por ahí, nos lo liquidan.

PREGUNTA:
¿Y su nombre era…?

CARLOS ZENÓN:
Lino Lanzó. Entonces, ¿qué pasa? Él es estratega, ¿cómo empezó como estratega? Podríamos… está en el libro, cómo él empezó, cómo fue la primera vez, todas sus cosas, esa historia está completa en el libro, completita. Porque si yo no soy honesto escribiendo ese libro, yo no soy honesto con esta, ni con mis hijos ni con mi familia ni con el país, ¿entiendes? Pero esto, cuando se iba a escribir la historia, esto había que decirlo. Porque para los efectos de ese tiempo, nadie conoce a Lino Lanzó. Pero este fue el estratega, este fue el estratega de la lucha todo el tiempo. Lo van a buscar, lo van a leer en el libro.

Cuando yo tenía un problema que la Marina decía vamos a tener tal o cual actividad, yo salía de aquí calladito y me iba a lo de Lino Lanzó, que vivía en una casita humilde en La Esperanza. Y él siempre me decía: “Zenón, cuando venga por aquí no traiga a más nadie”. Y yo un día le pregunté: “Pero, Lino, ¿cuál es tu preocupación?”. Y yo, ni por aquí. Y me decía: “Lo que pasa es que allí, don Zenón, es que uno nunca sabe quién nos va a chotear, quién va a decir las estrategias, y usted sabe que la Marina tiene dedos por todos lados”. Y tenía razón. ¿Entiendes? Y él siempre: “Viene solo”. Y yo llegaba solito a la casa, nos sentábamos, él decía: “Pepa…”, que era la esposa, “fríete dos o tres arepitas y poquito de pescado por ahí y café, que don Zenón y yo vamos a estar aquí en el balcón hablando”.

La primera vez que yo… para la primera, el primer momento organizado, que fue el 6 de septiembre del 78, que es la primera vez en la historia de Vieques que los pescadores se organizan para pelear en contra de la Marina. Nosotros no sabíamos cómo lo íbamos a hacer. Yo estaba desesperado, desesperado. Este… “¿Qué vamos a hacer?”, y yo retiro un grupito para allá, “miren, ustedes a ver qué pueden hacer, y ustedes qué pueden hacer, porque a ver qué hacemos”… Y él estaba calladito porque siempre a Lino se lo conoció, desde que quizás que estaba muy pequeño, pero siempre a Lino se lo conoció como un pescador solo, para arriba y para abajo, en la arena, haciendo dibujitos en la arena, con un pantalón hasta la rodilla, a veces sin camisa…

ALEIDA ENCARNACIÓN:
Y siempre pescó solo.

CARLOS ZENÓN:
Y siempre pescó solo. Correcto. Y cuando estaba… no voy a entrar en detalles porque, como te dije, es larga la cosa, pero cuando está el pueblo de Vieques preocupado por esas maniobras que se iban a hacer, que eran 28 días, 24 horas diarias, eso está en el récord.